La que cuida



Mi nombre es Natalia, soy psicóloga perinatal y psicoterapeuta.

Mi camino profesional siempre ha estado enfocado al cuidado de la vida. Las semillas se plantaron en mi primer trabajo como cuidadora y educadora en una asociación de personas con autismo y otros trastornos del desarrollo. Ahí acompañé a las familias en su día a día, lo más cotidiano, para empezar a comprender el valor de los cuidados y la sensibilidad necesaria al trabajar con seres humanos. Esto fue en Albacete, mi ciudad natal.

En 2010 me mudé a Madrid y a pesar de seguir buscando trabajo en aquello en lo que ya tenía experiencia, la vida me puso por delante y en bandeja la oportunidad de trabajar con bebés y madres. Aquí está el gérmen de mi pasión por la maternidad y la psicología perinatal. Sin saberlo, yo deseaba ser madre, pero antes tenía que quitar telarañas y conocerme mejor. Para ello hice terapia, canté y bailé y por supuesto me formé, ya que se me había dado el trabajo con bebés y yo poco sabía de ellos y menos de madres, en psicología perinatal, atención temprana y crianza, psicomotricidad, etc.

Ahora veo que todo tenía un sentido tal y como estaba sucediendo. Parece que para aprender y dedicarme a cuidar de la vida tenía que empezar por el principio. La vida en condiciones de mayor vulnerabilidad y dificultad, en la asociación Desarrollo de Albacete, los bebés y las madres: el nacimiento, mi trabajo como voluntaria en el Hospital La Paz con niños enfermos de cáncer: enfermedad y muerte. El trabajo con niños más mayores en escuelas y centros de terapia, cultivando el amor por la sensibilidad de cada cuerpo, cada ser humano, a través de talleres de cuentos y expresión creativa. Y finalmente el trabajo con adolescentes y adultos en la asociación Mentes Abiertas y de manera privada, como en la actualidad, en mi propia consulta en el distrito de Hortaleza, zona nordeste de Madrid.
Tras todo este recorrido, me convertí en madre, en 2015, de mi primera hija. Sabía muchas cosas en la teoría y de la experiencia de tantas madres a las que había escuchado pero hasta que tuve a mi hija en brazos (ni siquiera embarazada podía imaginar) no viví hasta el fondo la experiencia de la maternidad. Fue de gran ayuda conocer Entre Mamás, donde encontré un refugio cada semana, desayunando con otras mujeres y sus bebés recién nacidos. Conocer a Claudia, la capitana del barco de Entre Mamás y hacer su formación de Doula. Todo lo que he aprendido desde el inicio me ha nutrido como madre y me ha hecho sentir acompañada y cuidada, hasta el día de hoy que yo misma trabajo allí en la consulta de Psicología perinatal y Psicología infantil y familiar. De forma que me alimento de otras experiencias maternales a la vez que yo comparto y ofrezco la mía propia. Ahora ya como madre de dos niñas.

Me interesa el trabajo con el cuerpo, investigo la repercusión del apego y el trauma en nuestro propio cuerpo y experiencia maternal. Llevo desde hace años explorando a fondo y en ello sigo, la psicología femenina y me apasiona bucear en las profundidades del alma y la psique humana para comprender quiénes somos y cómo podemos ser amables con nosotros y con el otro. Trabajo sobre el camino de la amabilidad. Por un lado, con madres y familias, y por otro lado, con adultos que desean conocerse en un trabajo de psicoterapia que tiene en cuenta cuerpo y mente.

Buscadora de belleza en el día a día, en el Hogar, como metáfora de nuestro lugar íntimo donde descubrirnos y desplegarnos.

Natalia Navarro
Psicóloga y Doula
Psicóloga perinatal y psicoterapeuta

La que cuida de la Vida

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